El 12 de diciembre nos llena de
alegría: celebramos a la Virgen de Guadalupe, Patrona de América, como la proclamó el Papa San Pío X.
En junio de este año tuve la
inmensa suerte de ir por primera vez al Santuario de la Virgen de Guadalupe en
la ciudad de México, y lo cierto es que me hubiera quedado allí mucho tiempo,
solamente mirando la imagen milagrosa que la Virgen misma estampó en 1531,
apenas unos años después del descubrimiento de América, en el poncho (tilma, en
mexicano), de san Juan Diego.
Se han hecho infinidad de
reproducciones de esta imagen (sin ir más lejos, hace una semana estuve
celebrando Misa en una capilla dedicada a Ella, presidida por un cuadro que es
copia fiel del original, y del mismo tamaño). Pero es muy distinto lo que se siente al estar
delante del regalo que la Virgen quiso dejar para siempre sus hijos mexicanos y a todos: yo diría que en
él la Virgen está viva, y créanme que no soy nada aficionado a los milagros o a
las cosas extraordinarias.
Por lo demás, ¿a quién no le conmueve
y fomenta su confianza en la Virgen, escuchar el diálogo que mantuvo la Madre
con Juan Diego? Oye y ten entendido, hijo
mío, el más pequeño, que es nada lo que te asiste y aflige, no se turbe tu
corazón. ¿No estoy yo aquí, que soy tu Madre? ¿No estás bajo mi sombra? ¿No soy
yo tu salud? ¿No estás por ventura en mi regazo?
En Internet se encuentran
videos y estudios sobre la historia de la imagen de la Virgen de Guadalupe. Por
cierto, su nombre proviene de que Ella
hablaba con Juan Diego en la lengua indígena, el nahuatl. Al decir quién era,
usó la palabra “coatlallope”, formada
por coatl, serpiente, la preposición a, y llope,
aplastar. Ella es la que aplasta la serpiente. A los frailes franciscanos que
la escucharon les sonó a GUADALUPE, y así relacionaron el milagro de Juan Diego
con la advocación muy querida en España desde que en 1340, Alfonso XI construyó
una Basílica en su honor. En todo caso, la Guadalupe mexicana es original. Pero
es importante tener en cuenta que la Virgen se comunicó de manera que la
entendieran tanto los indios como los españoles.
Decía que en Internet hay
muchos estudios y videos sobre la milagrosa imagen de la Virgen: qué veían sus
ojos, cómo están ordenadas las estrellas de su manto, cuál es la composición de
la pintura, cómo se ha conocido que la Virgen aparece embarazada… Todo es motivo
de asombro y gratitud.
Cuando faltan doce días para
el nacimiento de Jesús, la fiesta de hoy nos acerca aún más a la gruta de Belén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario